¿Opositar o ser Abogado? ¿Cuál es la mejor opción?
Si acabas de terminar la carrera de Derecho y estás valorando hacia dónde orientar tu vida laboral, este artículo es para ti. Te dará unas nociones sobre ventajas y desventajas de opositar frente a ser Abogado. También, encontrarás un listado de oposiciones a valorar.
Empecemos diciendo lo obvio: el panorama laboral para los graduados en Derecho en España es bastante duro. Sobre todo si consideramos que, según dato del 2019 del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades recogido por el diario El País, el 56% de ellos se encuentra desempleado cuatro años tras graduarse. Sin embargo, la Fundación Conocimiento y Desarrollo señalaba, ya en 2017, que esta carrera es una de las más elegidas por los jóvenes españoles.
Por esta oferta excesiva, la Ley 34/2006, de 30 de octubre, sobre Acceso a las Profesiones de Abogado y Procurador de los Tribunales ha pretendido incrementar la dificultad para llegar a ejercer. Así, requiere la aprobación previa de un Máster de acceso a la Abogacía. Supuestamente, el Máster y la posterior prueba de acceso deberían hacer que hubiera menos Abogados, pero mejor formados. Sin embargo, el Máster no es más difícil que el Grado. El examen ha tenido hasta la fecha una ratio de aptos para ejercer de más del 90%.
Al final, el Máster de acceso a la Abogacía solo deja fuera a quienes no cuentan con los recursos o el tiempo necesario para llevarlo a cabo. Además, retrasa hasta dos años la entrada al mercado de trabajo sin facilitar ninguna especialización y, por ello, sin apenas facilitar la empleabilidad.
De otro lado, quien se gradúa en Derecho también tiene la opción de opositar para un cargo público. Para opositar no se necesita estudiar el citado Máster. Pero, en cambio, debe aprobar todas las evaluaciones requeridas por el Estado para la concreta oposición de que se trate. Estas plazas son muy codiciadas y muchos no logran acceder a ellas. La inversión, sin ningún tipo de retribución ni reconocimiento en materia curricular, es de varios años de estudio, normalmente.
Como consecuencia, para muchos graduados resulta bastante difícil decidirse entre una opción laboral u otra. Por esto, y a pesar de ser un blog dirigido a oposiciones, expongo ambas líneas de carrera y su retribución potencial a continuación.
Tabla de contenido
Visión general de las opciones de desarrollo profesional del Graduado en Derecho
Para empezar, revisaré las opciones de desarrollo profesional que ambas líneas de carrera podrían proporcionarle al graduado de Derecho:
Opciones como opositor
Quizá el gobierno sea el mayor empleador de graduados de Derecho, proveyéndoles muchas posibilidades de línea de carrera. La desventaja es que acceder a uno de estos puestos puede llevar muchos años y se basa en procesos a todo o nada. O consigues la plaza, o vuelves al punto de partida.
Sin embargo, la relevancia de los puestos, su notoriedad pública y las retribuciones que, de entrada, son mucho más altas que las de los Abogados, hace que haya muchas oposiciones interesantes que reciben a la mayoría de opositores.
Algunas de las ramas que reciben más opositores son:
Abogado del Estado
Se dedican a la asesoría y defensa jurídica de diversas instituciones del Estado.
Enlace a la convocatoria de 2019 que te servirá de ejemplo. Con ella podrás valorar el temario y las pruebas que debes superar para obtener una plaza de Abogado del Estado.
Letrado de Administración de Justicia
El Letrado de Administración de Justicia, anteriormente llamado Secretario Judicial, es el encargado de desarrollar las actividades administrativas y otras funciones procesales dentro de los Tribunales. Su función es clave, pues de ellos depende en gran medida que la justicia llegue a tiempo. Como dice el dicho: la justicia tardía no es justicia.
Forman parte del Ministerio de Justicia. En este enlace encontrarás la convocatoria de 2019, para que puedas valorar el programa y exámenes de esta oposición.
Notarios
Su función es dar fe pública de actos y negocios jurídicos.
Este enlace te llevará a la convocatoria de 2020, para poder analizar esta oposición más a fondo.
Fiscales
Tienen la potestad de ejercitar de oficio ante los tribunales acciones penales defendiendo el respeto por las leyes, los intereses del estado y los derechos de los ciudadanos. Están adscritos al Ministerio Fiscal.
Jueces
Se encargan de administrar justicia entre los ciudadanos y las instituciones. Pueden desempeñar sus funciones en el Tribunal Supremo, la Audiencia Nacional, Tribunales Superiores, Audiencias Provinciales y Órganos Unipersonales. Pertenecen al Poder Judicial.
Las oposiciones de Jueces y Fiscales son conjuntas. Aquí tienes un enlace a la convocatoria de 2019 como ejemplo, para que puedas valorar el programa y las pruebas que debes pasar para obtener una plaza de Juez o Fiscal.
Otros puestos en la Administración
Si bien los anteriores son los más conocidos, también hay otras oposiciones para los graduados en Derecho que reciben gran número de opositores, a saber:
- Letrados de otros Cuerpos. La Administración de la Seguridad Social, los Ayuntamientos, las Universidades, las Cortes, el Consejo de Estado y sus equivalencias a nivel autonómico, disponen de sus propios Letrados;
- Gestores y Tramitadores, tanto del Estado como de la Administración Civil del Estado, y Auxilio Judicial;
- Cuerpo Jurídico Militar;
- Técnicos y Agentes adscritos al Ministerio de Hacienda;
- Inspectores y Subinspectores de Trabajo y Seguridad Social;
- Plazas en el cuerpo de Instituciones Penitenciarias;
- Auxiliares Administrativos;
- Cuerpos de Policía;
- Carrera Diplomática;
- Jurista-lingüista de la Unión Europea;
- Secretario de Ayuntamiento.
Aunque algunas de estas oposiciones no requieran el Grado de Derecho específicamente, sí que es una gran ventaja disponer de él, pues las materias objeto de dichas oposiciones tienen gran contenido jurídico.
Como podéis ver, el catálogo de posibles puestos para un Graduado en Derecho es muy amplio.
Tipos de procesos para trabajar en la Administración Pública
Como ya sabrás si sigues este blog, para acceder a un puesto en la Administración es necesario opositar. Por si eres novato en el tema, este es el proceso –a grandes rasgos– a seguir según el puesto:
- Oposición vs Concurso-Oposición: el sistema de oposición se basa en una o varias pruebas de acceso, en la que los puntos obtenidos determinan, sin más, quién obtiene la plaza. Por el contrario, el sistema de concurso-oposición supone que, además de los puntos del examen (o exámenes), se bareman méritos para determinar quienes adquieren la condición de funcionario.
- Turno libre vs promoción interna: existen vías de oposición interna que permiten ascender en determinadas ramas. Estas son vías de ascenso reservadas para ciertas categorías de funcionarios. Por ejemplo, de Auxilio a Tramitación a Gestión y, finalmente, al Cuerpo de Letrados de la Administración de Justicia. Otras plazas solo pueden lograrse por oposición por turno libre, como la posición de Fiscal.
- Bolsas de trabajo: la mayoría de puestos tienen también la posibilidad de ser cubiertos por interinos, mediante bolsas de trabajo temporal por concurso de méritos. Por supuesto, en este caso la plaza no es «tuya». Trabajarás en ella temporalmente y hasta que sea sacada a movilidad interna o se convoque en una oposición.
Como sabrás, los temarios para opositar suelen ser bastante amplios, por lo que se requerirá un tiempo considerable para su estudio. Muchos opositores se preparan en academias o contratan preparadores. Una posibilidad es estudiar por cuenta propia con manuales de estudio para oposiciones. Pero según el tipo de oposición y la experiencia del opositor esto puede ser mejor o peor idea.
Elegida una oposición de las anteriores, las siguientes dos decisiones más relevantes son la del preparador que se escoja y los manuales que se elijan. Si quieres opositar a Jueces y Fiscales, te interesará esta comparativa de temarios actualizados para futuros Jueces y Fiscales. Y si barajas si opositar a Letrados de la Administración de Justicia, entonces esta comparativa de temarios de Letrados te será útil.
Finalmente, debe considerarse la posibilidad de fracaso ante la abundante competencia. Hay quienes opositan año tras año y no logran acceder a una plaza. En el ínterin puede perderse también mucho tiempo, cuyo sacrificio solo se verá recompensado completamente por el éxito.
Consejo final: para valorar la dificultad de una oposición, no solo te fijes solamente en el temario y el tipo de examen. Analiza la ratio de opositores por plaza. ¡A mayor número, mayor competencia!
Opciones laborales como Abogado
En la otra cara de la moneda, fuera de la Administración, está la posibilidad de ejercer como Abogado. Esto puede lograrse de manera independiente, en un despacho colectivo o dentro de una organización empresarial o similar.
Abogado Autónomo
Esta opción de desarrollo profesional ofrece independencia y autodeterminación. Encuentra el gran escollo de que supone aprender uno solo. Sin mentores, el Abogado está obligado a reinventar la rueda. Por eso será muy importante generar fuertes lazos de alianza con otros Abogados con más experiencia.
Si bien no es la opción más recomendable para un nuevo Graduado, es cierto que, para quienes viven en pequeñas ciudades y donde no se encuentran grandes conglomerados jurídicos, puede llegar a ser la única opción.
Quien la elige puede ejercer como abogado generalista o especializado en las distintas ramas (civil, penal, tributario, laboral, mercantil y corporativo, etc.). La realidad es que el especialista suele ser una persona con años de experiencia que ha decidido abandonar un despacho colectivo. Esto se debe a que es muy difícil posicionarse como experto de confianza como joven graduado –aunque sea posible con esfuerzo y tesón.
Despachos de Abogados
Conformados por varios Abogados o secciones de especialistas en diversas materias jurídicas, los despachos pueden tener distintos tamaños. Algunos cuentan con más de 250 juristas en su plantilla. Los de carácter mediano cuentan con más de 30 Abogados y suelen tener una cierta especialización. Los más pequeños tienen mayor éxito, generalmente, cuando tienen el carácter de boutique ultraespecializada. Los despachos pequeños generalistas compiten contra todos los demás, lo que hace que sus rendimientos sean menores.
Los despachos más grandes suelen tener su sede en las ciudades metrópolis nacionales. Así, muchos tienen sede en Madrid y Barcelona y algunos tienen filiales con base operativa en otros países.
Algunos despachos tienen límites de edad para el ingreso por la base de la pirámide de la organización. Esto es un grave problema si decides acceder a uno de estos despachos tras opositar durante años. No podrás acceder como becario o abogado junior, generalmente, hasta demostrar tu valía por otros medios. Por su parte, el abogado especializado con años de experiencia es el perfil más demandado después del de becario. El Universitario que está cursando las prácticas curriculares de un Máster de especialización específico para un sector suele encontrar un despacho que lo acoja. Si después lo contratan como Abogado dependerá -salvo coyunturas económicas- de su mérito y capacidad y de cuanto haya aprendido en su periodo en prácticas.
Lo malo: si no se logra pasar a la fase de junior puede ser difícil alcanzar los años de experiencia laboral que hagan destacar tu CV.
Puedes leer más sobre las particularidades de pasar de opositor a Abogado aquí.
Abogados in-house sectoriales
Una alternativa adicional, es trabajar dentro de instituciones o empresas como asesor jurídico interno. Tal es el caso de grandes empresas sectoriales, ONGs, organizaciones políticas o sindicales.
En este caso, se requerirá una especialización horizontal en el sector en el que se desea trabajar. Por ejemplo, si quieres trabajar en el departamento in-house de Iberdrola, deberás tener formación o experiencia específica sobre energía.
Condiciones para ejercer
Tras exponer qué posibilidades laborales, veamos ahora los requisitos de la normativa española para ejercer la Abogacía.
Requisitos para trabajar como Abogado
Como ya he señalado, los graduados en Derecho deben aprobar un Máster de Acceso a la Abogacía en el que se estudian temas generales de todas las ramas del Derecho y realizar un examen oficial organizado por los Ministerios de Justicia y de Educación para poder ejercer como Abogado.
Asimismo, deberán contar con la habilitación de un Colegio Profesional.
Además, dada la competitividad del mercado laboral, se ha convertido en imprescindible el estudiar un Máster de Especialización. Si se quiere acceder a un puesto de calidad en un despacho de renombre es casi la única vía.
Los evidentes contras de esta opción profesional son el coste que la educación formal adicional exige. Como mínimo 3 mil euros para el poco útil Máster de la Abogacía, más una cuantía aún mayor para un Máster de especialización de calidad. Además del tiempo necesario para esta formación adicional.
El trabajo como Abogado tiene otras dificultades adicionales: mayor dificultad para conciliar, jornadas que suelen exceder las 40 horas semanales, mayor inestabilidad que la del funcionario, etc.
Comparativa salarial entre Abogados y Jueces o Fiscales
Una parte importante a considerar para quienes deciden su futuro profesional es la retribución económica que pueden obtener de su labor. Como este es un blog dedicado a Judicatura, Fiscalía y Letrados, me ceñiré a comparar estos con la Abogacía. Esto sin perjuicio de que haya otras opciones, como la del Notario o el Abogado del Estado que puedan estar aún mejor pagadas.
Como funcionario de las Carreras Judicial y Fiscal
Conforme a la Ley 15/2003, de 26 de mayo, reguladora del régimen retributivo de las carreras judicial y fiscal, los sueldos de estos servidores públicos están compuesto por retribuciones fijas y variables. Dentro de las primeras están el sueldo base, bono por antigüedad, compensación por destino, gastos por representación y complemento específico (plazas especiales).
Así, un Juez o Fiscal recién ingresado puede obtener como sueldo base 1.440.11 euros, con complementos de destino por población de 1.591,64 euros y por representación de 193,74 euros. Se puede alcanzar un sueldo mensual bruto de 3.225,48 euros brutos. A este, lógicamente, habremos de restarle la retención del IRPF, (sobre un 20 %, es decir, sobre 656 euros) y la cuota a la Seguridad Social (sobre 189 euros). El total aproximado es un salario para nuevos Jueces y Fiscales de 2.378 euros netos mensuales en un destino con un buen complemento.
Si a esto le sumamos las pagas extraordinarias de julio y diciembre (equivalentes a un sueldo base cada una), el total anual de remuneración para un nuevo Juez o Fiscal sería de 41.586,1 euros brutos al año.
Si quieres saber más, este artículo explica a fondo la retribución de Jueces y Fiscales.
Letrado de Administración de Justicia
Los Letrados de Administración de Justicia también cuenta con una estructura salarial compuesta por sueldo base, compensaciones y complementos específicos. Se ubica en un rango mensual entre 1.700 euros, para el Letrado de tercera categoría, y 2.400 euros, para el de primera categoría.
De acuerdo al Real Decreto 2/2020 del 21 de enero, el sueldo base anual de estos funcionarios estaría entre 17.224.56 euros y 19 504.80 euros, según la categoría a la que pertenezcan.
Para hacernos una idea, un Juez o Abogado Fiscal sería equivalente a un Letrado de tercera categoría. Un Magistrado o un Fiscal, a un Letrado de segunda categoría y un Magistrado o Fiscal del Supremo, equivaldría a un Letrado de primera categoría.
A estos sueldos base habría que añadir el complemento de destino que hace que tengan salarios equiparables a los de un Juez o Fiscal.
¿Y cuánto cobra un Abogado?
Para conocer los salarios medios de los Abogados tenemos que diferenciar a quienes trabajan como autónomos, que pueden tener ingresos muy variables y que dependerán íntegramente de su esfuerzo, y los Abogados de despachos colectivos y Abogados in-house, que suelen tener una banda salarial que depende de su despacho colectivo o empresa. Estos últimos, según su puesto de trabajo y experiencia, pueden acceder a mayores o menores sueldos.
El Convenio Colectivo de Oficinas y Despachos de Madrid 2019-2021 indica que los Abogados (como empleados de oficina) deben ganar como mínimo 1.292,50 euros en 14 pagas. Por su parte, la II Guía Spring del Mercado Laboral recoge que la media, según experiencia, se encuentra en los siguientes rangos:
- Los Socios ganan entre 100.000 y 500.000 euros de media.
- Los Asociados, entre 75.000 y 110.000 euros de media.
- Los Abogados junior, entre 15.000 y 25.000 euros de media.
Si te interesa, puedes encontrar más detalles sobre cómo varían las franjas salariales por campo de especialización y tipo de ciudad -grandes o no- en este artículo sobre las expectativas laborales de los Abogados.
Se puede observar que, a simple vista, los Abogados tienen mayores disparidades. Muchos más Abogados están en situación de desempleo. También hay una mayor retribución para los que alcanzan la parte superior de la pirámide, sobre la base de su esfuerzo, capacidad, actitud y contactos. Al fin y al cabo, la profesión de Abogado está sometida al principio de libre competencia.
Para concluir – toma tus propias decisiones
Con toda esta información que te he mostrado no te puedo decir claramente qué camino debes seguir como graduado de Derecho. Todo depende de tus expectativas y metas. Yo considero que vale más hacer lo que te gusta y tener para vivir que forrarte pasando 9 horas al día haciendo algo que odias. O más, si contamos traslados.
Sin embargo, sí puedo alentarte a que seas flexible con tus elecciones y estés dispuesto a revisarlas cuando alguna no te dé los resultados que esperaste inicialmente. Procura tener la mente abierta, revisar tu camino y estar dispuesto a reorientarte hacia nuevos senderos. Algunas buenas sorpresas te puedes encontrar. A veces, lograr una meta es lo mejor que nunca te ha pasado.
Si finalmente decides seguir el camino de las oposiciones a Justicia, puedes seguir leyendo mi blog en el que encontrarás técnicas de estudio y de test. Si te decides a opositar, recuerda lo ya dicho: elige bien tus materiales y asegúrate de que se adaptan a ti. Son tus herramientas de trabajo –y no es lo mismo talar un árbol con un hacha que con una motosierra–. Arriba tenías enlace a las comparativas de temarios y puedes encontrar aquí información sobre mis manuales para futuros Jueces, Fiscales o para Letrados de la Administración de Justicia y aquí puedes encontrar información adicional sobre mis manuales para Jueces y Fiscales y aquí, para Letrados.
Un día decidí dejar de opositar a Justicia y empezar a buscar cómo dar algo de valor a los demás. Desde entonces he publicado una treintena de manuales para oposiciones y he descubierto que ayudar a los demás a lograr sus objetivos me encanta. Firme defensor de tres principales ideas: del optimismo de combate, del aprendizaje de por vida y de la reciprocidad+1.